Aunque la mayoría de la gente es consciente de la importancia de la fase inicial de un proyecto, a menudo recibe muy poca atención. En muchos casos, se carece de una evaluación exhaustiva de la situación y la capacidad: las actividades de otras organizaciones no se mapean de antemano y el papel de las partes interesadas y los socios potenciales a menudo se ignora o se considera solo después de la etapa de planificación.

La práctica demuestra que el descuido de estos pasos hace que el proyecto sea vulnerable a circunstancias imprevistas y puede poner en peligro los esfuerzos hacia el éxito.

Las siguientes herramientas pueden ayudar a guiar a los planificadores e implementadores de proyectos a través de estos pasos: